12/29/2011

CONSIDERACIONES PARA FIN DE AÑO.

Bogotá, Jueves 29 de Diciembre de 2011
ARREGLANDO EL PAIS #5
Por: José Roberto Escamilla

CONSIDERACIONES PARA FIN DE AÑO.

Hoy me di cuenta que estoy subiendo de peso de forma acelerada y la ropa me está quedando un poco apretada. Tengo dos opciones relativamente fáciles que son: 1) Acostumbrarme a usar prendas apretadas ó 2) Comprar ropa más grande. Con la primera opción corro el peligro que en un momento dado no seda más el material y se rompa o –si este es de muy buena calidad – me quede sin oxigeno. La segunda opción es solo adaptar la ropa. Pero quiero tomar una tercera opción que es hacer ejercicio y reducir la ingesta de alimentos.
Creo que nosotros los colombianos tendemos por las primeras dos opciones con los problemas, y aunque la adaptación es una herramienta fundamental para la supervivencia, al acostumbrarnos a vivir con lo que tenemos, tarde o temprano nos estancaremos y llegará el punto que es maleabilidad, recursividad o como se le quiera llamar no será suficiente.
Ejemplos claros de los que estoy diciendo se puede ver cuando se añade más recursos y tiempo a las obras públicas; acostumbrarnos a esquivar el hueco, el peatón imprudente o el automotor mal parqueado cuando vamos manejando rumbo al trabajo; al aumentar el pie de fuerza militar o policial cuando crece la delincuencia, cuando instalamos una cerradura, reja, reflector, alarma para resguardarnos del peligro;  los letreros de cuide sus objetos personales en los restaurantes, centros comerciales, etc.
No puedo negar que son medidas que solucionaron un problema en su momento pero no lo erradicaron  en su totalidad. Prueba de esto es que siguen robando, secuestrando, haciendo tomas guerrilleras, etc. La adaptabilidad es una herramienta muy buena y necesaria de supervivencia pero cuando se usa en exceso es perjudicial.
Tengo recuerdos muy tempranos de casa con rejas de uso decorativo a alguna de ellas sin estas. Ahora hay rejas hasta en las ventanas. En los pueblos se podía dejar los carros con las puertas sin seguro y en muchos casos en tierra caliente se veía las puertas abiertas de las casa.  
Aunque en un momento estas medidas preventivas fueron eficaces. No solucionaron el problema de raíz. Mi pregunta es ¿Qué paso para que la sociedad Colombiana para que tomara este rumbo?
De que me sirve un país que está creciendo económicamente pero que su sociedad va decreciendo en sus valores y sus principios.  
Hace poco escribí que en los colegios deberían suprimir cualquier reconocimiento a la excelencia académica y al buen comportamiento. ¿Por qué? Porque en mi concepto este tipo de acciones deberían ser normales. Cuando se crea este tipo de estímulos también se da el mensaje que este tipo de actitudes las tiene solamente personas virtuosas o con un don especial. Además de manera injusta se señala y castiga con más severidad al bueno que al malo y se premia de manera exagerada cuando el malo quiere corregir sus errores. Aquí a los más malos se le hace una legislatura especial, se les da protección especial y se les recompensa con rebaja de penas. Son acciones prácticas y efectivas pero también creo que le están enviando un mensaje peligroso a las nuevas generaciones. Pueden tildarme de radical pero me parece que un estado que negocia con gente al margen de la ley está buscando de alguna manera tapar su incapacidad e ineficiencia de manejar este tipo de conductas.
Irónicamente los países que demandan salidas negociadas y respeto a los derechos humanos fueron aquellos que en un pasado reciente lograron su paz sin ellos. Que alguien me diga cómo fue que se ganó la segunda guerra mundial y cual fuel el destino de los vencidos.  En materia económica no hay menos contradicciones. El primer mundo pide el uso moderado de nuestros recursos bajo el titulo de patrimonio de la humanidad  cuando ellos hicieron su desarrollo con el uso excesivo de los mismos. Hablan de la igualdad, el respeto y la tolerancia –entre ellos – pues su trato hacia nosotros como en las promociones “aplican condiciones y restricciones”.
La solución fácil sería tratarlos de la misma manera pero eso, en mi opinión, seria rebajarnos a su nivel y como leí en “twitter” palabras más, palabras menos: “Con ese tipo de personas no peleo pues me estaría rebajando a su nivel y allí me gana por experiencia”.
Mi propuesta, mucho más difícil, es imitar estas sociedades “avanzadas” en sus aciertos  y mejorarlos. Ganar en una competencia la cual vamos perdiendo. Es hacer un sacrificio por el futuro. Dejar de ser una sociedad dependiente del primer mundo y lograr nuestra madurez o adultez como nación. Pero como dije antes este tipo de proyectos no deben ser políticos sino decisiones que nacen de la sociedad. Pero que depende de la fuerza y la voluntad del individuo para permanecer en el tiempo.
Atención, que no se malinterprete mi mensaje. Propongo una independencia sana y sin rencores.
Entonces mi deseo para el 2012 es que los colombianos crezcan como individuos y como sociedad, que enseñemos a las nuevas generaciones  y a nosotros mismos a ser personas de buenos valores, organizados, trabajadores, independientes y solidarios con los demás. Tener el firme propósito que se nos conozca ante el mundo por nuestras virtudes y no por nuestros defectos. Promotores de una nueva cultura a nivel local, regional y – por qué no – mundial. 

No hay comentarios: