9/29/2011

IDEA PARA MEJORAR LA MOVILIDAD DENTRO DE UN BUS DE TRANSMILENIO

(Hacer click en la imagen para agrandar)

Hace poco me di cuenta el espacio tan reducido que hay entre persona y persona cuando están de pie en un bus de Transmilenio.
Buscando en sistemas de transporte de ciudades con bastante población me di cuenta que se sacrifica espacio por comodidad.
Actualmente hay un espacio de 80 – 85 cms aproximadamente para dos personas de pie y una tercera que debe pasar por el espacio restante para salir o entrar al bus.
La idea es quitar una fila de sillas y las que queden ubicarlas a los lados del bus mirando hacia el centro. Así mismo correr la barra que utilizan los pasajeros para sujetarse al lugar donde estaban las antiguas sillas. Como resultado hay un espacio más amplio en el centro para  moverse en el bus.
También quitar las barras para sujetarse que están ubicadas en las entradas para evitar que la gente obstruya la salida y entrada de pasajeros.



9/26/2011

El Peso de la Violencia

El peso de la violencia
Por: José Roberto Escamilla Escamilla

Hace ya un rato que no veo noticieros pues he notado que malgeniado ando y cualquier cosa me hacía explotar. Hace una semana empecé a leer sobre la economía social de mercado la cual fue la ruta a seguir por Alemania y Austria para su recuperación después de la segunda guerra mundial. Es un modelo bastante llamativo pues llevo a Alemania a ser el tercer país más rico del mundo y el segundo exportador más grandes después de China. Si comparamos territorio, población y recursos disponibles seria el modelo que Colombia debería seguir para su desarrollo como nación.

Pero en ninguna parte he podido encontrar como se pudo reconstruir y volver a la vida la población alemana en un conflicto que les dejo 5 millones de muertos (1939 -1945), ciudades totalmente destruidas y poblaciones desplazadas. Si esto lo comparamos con las  52 mil muertes del conflicto interno Colombiano (1964 – 2010) esto nos deja mucho en que pensar.

El punto es que algunos de nosotros vamos acumulando rencores productos de la violencia que nos tocó vivir y otro tanto heredados de tiempos que no nos corresponde. Se supone que para hacer la paz hay que dejar de lado los rencores y empezar de nuevo ¿Pero cómo?

Peor aún esa violencia que antes era netamente armada ahora se trasladó a la familia, la forma como manejamos y hasta la forma como nos expresamos ante los demás.
Nos hemos convertido en una sociedad que tolera las muertes a granel y la única forma de protestar y responder ante la violencia es con más violencia.

Creo que mi generación ya tomó parte en el conflicto así como nuestros padres y como dice el dicho popular “la fruta no cae muy lejos del árbol”. ¿Cómo hacer para no transmitirle ese odio y ese rencor a los que están por nacer?”. Será que nosotros seremos tan valientes de tragarnos todo ese odio y ese dolor para empezar a reconstruir nuestra sociedad o legaremos esa responsabilidad en las “futuras generaciones”.  Hay dos caminos o nos acabamos a bala y dejamos el terreno disponible para el repoblamiento o hacemos las pases de una vez por todas. Es como dejar de fumar. Se hace de una vez porque de a poquito a poquito no funciona. 


9/04/2011

El Colombiano Superior.


El Colombiano Superior.
Por: José Roberto Escamilla Escamilla.

Hace poco me sentí insultado por un tráiler de la nueva película “Colombiana” de Luc Besson . Así que por medio de éste escrito pretendo convencerlo y convencerme que así sea ésta, parte de la realidad del país, es posible el cambio hacia algo mejor.

Debo advertir que es propaganda nacionalista pero del nacionalismo bueno. Donde la superioridad se da desde el individuo y no proviene de una manada o turba de individuos que se visten igual, hablan igual y siguen a una sola persona.

Que no se reconozca al colombiano por sus atuendos sino por sus acciones y su forma de pensar. Aquel que no importando la adversidad sea capaz de superarla si necesidad de recurrir a la ilegalidad. Aquel quien lo de todo para que su descendencia viva en un lugar mucho mejor. Así lograr una nación autosuficiente y orgullosa de lo que es pero abierta a recibir y dar al mundo con generosidad. Este es en mi concepto de la verdadera superioridad.

Entonces, ¿Cuáles serían las mínimas cualidades del Colombiano Superior?. 
1. Su independencia.
2. Su Autosuficiencia.
3. Su Control de sí mismo.
4. El Asumir sus acciones con responsabilidad. 
5. Su Honradez.
6. Su Productividad 
7. Su Solidaridad.
8. Su Dignidad.
9. Su capacidad de superarse a sí mismo todos los días de su vida. 
10. Su curiosidad por el saber.  
11. El sentido del humor.
12. La amabilidad.
13. La Alegría
14. La Valentía
15. La Humildad
16. Su fuerza física
17. Su resistencia
18. El respeto
19. La tolerancia
20. Y tantas otras que desconozco o que he pasado por alto.

Y sobre todo la capacidad de transmitir estas cualidades a las próximas generaciones por medio del ejemplo propio.

Insisto que esto es un ejercicio que se realiza desde la individualidad y la tarea es la constante búsqueda de estos ideales por sí mismo.  Cuando se recurre el grupo le estamos dando la fuerza a éste y por ende nos la restamos. También nos estamos quitando independencia y capacidad de tomar decisiones por cuenta propia.  

Cuantos tristes ejemplos hay en la historia donde muere el caudillo o el líder y todos los ideales se van con él a la tumba. Y toca esperar décadas, centurias y hasta milenios para que alguien retome su ejemplo.   







9/01/2011

Colombia. Una sociedad sin futuro


Colombia. Una sociedad sin futuro.

La razón por la cual los niños y los jóvenes no serán la esperanza ni el futuro  de Colombia
Por: José Roberto Escamilla E.

Es una tarea casi imposible casi imposible tener la esperanza de un futuro mejor en las manos de los que ahora son niños pues no están recibiendo el mejor ejemplo de los adultos de hoy.

Esto no pasa solo en los niños sino también hay una percepción de que los adolescentes de hoy son una generación perdida y descarriada. Cabe preguntar ¿En manos de quiénes está el ejemplo y la educación de esos niños y  jóvenes?. Precisamente en el mismo rango de edad que critica o tiene puesta las esperanzas de un futuro promisorio en las manos de ellos.

Otro de los que yo considero un mito en parte creado por los medios, gobierno, sectores educativos, es el tratar de hacer creer que los buenos somos más en este país. Yo también me ilusione bajo esta lógica hasta cuando me hice una simple pregunta ¿Si los buenos fueran la mayoría la tendencia no sería a que los actos de corrupción y violencia fueran la excepción y no la regla?

El optimismo es bueno cuando se sabe que se tiene las herramientas para llegar al deseo anhelado. Pero cuando esa “buena vibra” es alimentada con ideales lo único que producirá será más ideales.
También es muy difícil que las futuras generaciones tengan un papel importante en el desarrollo de nuestra sociedad cuando nosotros mismos no le estamos dando las herramientas que le faciliten esas tareas. Nos estancamos en señalar y culpar a nuestros contemporáneos, a los mayores y a los mismos jóvenes. Pero no hacemos nada para el cambio que soñamos pero por el cual no queremos trabajar.

Leyendo un poco sobre el milagro económico alemán de la posguerra o “Die deutsch wirtschaftswunder” –para los que saben alemán  o lo están aprendiendo como yo – se puede observar cómo Alemania volvió a surgir no solo por el plan Marshall –pues los países vencedores recibieron más recursos – sino que fue el producto de la voluntad de la sociedad  por ser mejor. El resultado: Alemania es la tercera economía a nivel mundial y la primera en Europa.  También tiene que ver su sistema de educación dual profesional donde el aprendiz tiene contacto directo con la empresa desde el inicio de su formación pero de eso escribiré en próximos artículos.

La pregunta es si la sociedad actual estará dispuesta a darle lo mejor a las futuras generaciones o le seguirá dando limosnas y curando sus errores con “pañitos de agua tibia”.